CAMBIOS...

¿Que se hace cuando tu vida cambia de repente? ¿Cuando tus sueños se rompen en mil pedazos y tu futuro se ve incierto? ¿Cuando todos tus planes pierden sentido y lo que siempre creiste que pasaría no sucederá jamás? Hoy me he levantado tranquila, a pesar de que ayer era una magdalena. Supongo que será porque me he resignado. O lo he entendido. Quizás no lo merezco y por fin me he dado cuenta, o no me merece y mi corazón ya se ha cansado se sufrir en vano. En cualquier caso, hoy estoy serena. No tengo ganas de reir ni llorar, simplemente estoy, y eso ya es todo un logro (aunque sólo sea por ahora).
Quizás vaya siendo el momento de pensar un poco más en mí, de darme cuenta de que no todo el mundo da lo que recibe, ni valora lo que tiene. De que nada es para siempre y todo tiene un final... de descubrir verdaderamente quien soy y que quiero en la vida, de VIVIR en definitiva.
De viajar, de bailar, de calzarme los tacones y salir hasta el amanecer, de divertirme de verdad y hacer todas las cosas que me gustan y no he hecho en estos años, de SOÑAR de nuevo.
De ir al cine y no tener que suplicar por una compañía, de darle TIEMPO al tiempo.

He leido esta mañana una frase que me viene como anillo al dedo:

"NUNCA OBLIGUES A ALGUIEN A PERMANECER EN TU VIDA, SI QUIERE IRSE QUE SE VAYA, YA LLEGARÁ ALGUIEN QUE QUIERA PERMANECER A TU LADO"

Y yo voy a intentarlo...