Era un lunes estupendo, de esos que te paras a pensar para escribir el poema más bonito del mundo. ¡Que ilusa! ¿Como se me iba a ocurrir tal cosa? El poema más bonito del mundo era despertar a su lado, y eso ya estaba escrito...

Comentarios

Entradas populares de este blog

EL GIRASOL EN EL LENGUAJE DE LAS FLORES

RESUMEN 2017

UNA SEMANA MÁS PARA QUERERTE